ben-day


Parece ser, que las tramas de puntos con que se logran los tonos en las artes de imprenta se llaman puntos ben-day (o bendei).
Según he leído, Roy Lichtenstein, empezó a utilizar tramas de puntos en sus obras, ya que las viñetas en las que se basaban sus cuadros, estaban coloreadas con esta técnica, y al proyectarlas ampliadas para hacer el dibujo, los puntos se notaban mas claramente. Según cuenta el propio pintor, al principio usaba las tramas para decorar partes de la superficie de sus cuadros, al igual que las viñetas, pero que poco a poco fue considerando la posibilidad de tomar estos puntos como elementos en si mismos, a la hora de hacer sus composiciones.
Personalmente, me encanta Lichtenstein, como alguna vez ya he comentado en el blog. Y en obras como la de la imagen he utilizado tramas de puntos como fondo sobre el que aplicar los drippings. Yo los consigo (los puntitos) con pintura en spray, usando una rejilla agujereada como máscara. Y la verdad es que en cuanto un cuadro tiene puntos bendei, su aspecto es mucho más cercano al pop de Lichtenstein, que a ninguna otra tendencia.

Concursos


Para los que no contamos con una galería en la que mostrar periódicamente nuestro trabajo, los concursos son el escaparate para nuestras obras. Si nos seleccionan claro está. Este año, he presentado obra en un concurso de pintura, con el que se elegía la etiqueta de un vino, donde hubo suerte, y en otro de escultura al que presenté la obra de la imagen, donde fui rechazado.
Tengo la sensación de que en los concursos dónde el premio es importante, los que deciden prefieren no arriesgar la pasta y premian a los que de alguna manera tienen ya un cierto reconocimiento o al menos un recorrido por galerías y salas. Vamos que apuestan por valor seguro. Si el jurado, se lleva parte del premio, lo desconozco, aunque siendo galeristas muchas veces los miembros del jurado, no me extrañaría que reclamaran su comisión al artista, por esta venta camuflada de certamen. O quizá estoy leyendo mucha novela negra ultimamente.
Aunque no sea cierta, con esta explicación, al menos me "autojustifico" el rechazo, sin dañar mi ego artistico.Respecto a la escultura, decir que esta hecha en escayola, con figuras que hace algún tiempo traté de vender como souvenirs, con no demasiado éxito. Los que salieron con fallo del molde los aproveché en esta versión de la columna Trajana, mezclada con trozos de azulejo en plan Gaudí. Sin embargo, lo que mas me ha influido al hacer la escultura, han sido las horas de yesista que hice en las reformas de mi casa. Horas desde luego que no pueden aspirar a ser pagadas como las de un escultorrrrrr, y por eso la obra no ha sido ni seleccionada.

Malevic




Recuerdo que el banco que había bajo la casa donde yo vivía antes, estaba decorado con láminas de Malevic y Mondrian. Mientras me llegaba el turno pasé bastantes ratos fijándome en la simplicidad de las composiciones de aquellos posters.
En mis cuadros aunque lo más llamativo sean los drippings, creo que lo sustancial son las composiciones que hay bajo ellos, influenciadas sin duda por las pinturas abstractas geométricas o minimalistas.
En la imagen pequeña hay dos obras de Malevic, entre ellas el célebre cuadrado blanco sobre fondo blanco , una composición muy parecida a la que utilizo yo en este cuadro con tableros de DM cortados, y pintados luego con rodillo al oleo.
Los drippings son aquí un mero ornamento encima de la composición.Aunque son los cuadros más simples, son también desde mi experiencia,los más eficaces de cara al público.
Los pocos clientes que tengo, suelen optar por estas obras, como alguna ya expuesta en el blog, de entre las distintas lineas que trabajo.

Marcos


Vuelven a estar de moda los marcos labrados barrocos, que hace poco tiempo aborrecíamos casi todos. A mí no me gustaba nada enmarcar mis cuadros, como alguna vez he comentado, prefería un listón sencillo como protección, aunque eso si teñido y encerado.
Yo empecé a trabajar con marcos hace algunos años. Primero, haciendo casi una pequeña parodia, serrando alguno de los lados por el que se escapaban los brochazos. Poco a poco fui apreciando el valor de esos pedazos de madera para reconocer ahora, que dan un gran empaque a muchas obras, aunque yo casi siempre los uso dentro del mismo cuadro.
En este de la imagen, lo he usado como un elemento mas de la composición. El resto lo forman las célebres manos de la creación de la capilla sixtina de Miguel Angel, y unos dripings (de un sólo color esta vez). Es uno de los collages que he trabajado últimamente, a partir de obras célebres. La estructura en este caso es muy simple: un rectángulo dentro de otro.

Collages

Además de angelitos y otros cuadros clásicos, he estado haciendo collages con posters de cine como el de Groucho Marx de la imagen. Tambien he trabajado con posters de Chaplin, Clint Eastwood o Audrey Hepburn.

Las fotos están rasgadas a mano para dar la sensación de poster arrancado de una pared, y pegados sobre composiciones con paneles rectangulares pintados al óleo con rodillo. También he añadido en la esquina algunos drips.

El collage, como forma de trabajar es una constante en muchos de mis trabajos. En éste es mas evidente, al tratarse de papel, pero viendo otras obras, creo que como más cómodo me encuentro es combinando y componiendo con objetos ya realizados sean fotos, maderas viejas, paneles... buscando especialmente el contraste de texturas.
La parte mas pictórica son probablemente los drips, que utilizo como adorno y como elemento integrador de todos los objetos.

trigo, cardos, tierra... pintura



De las exposiciones que yo haya visto, probablemente de la que mejor recuerdo tengo es de una de Anselm Kiefer en la sala del Prado, que está en el parque del Retiro, (¿Palacio de velazquez?)Fue hace bastante, pero desde aquello tengo a Kiefer en mi altar, y a pesar de eso hasta el verano pasado no me decidi a trabajar en esa onda, tan matérica.
El resultado fue unos cuadros en los que con resina pegué tierras, cardos, trigos, y hasta girasoles auténticos. En la foto, he puesto un detalle de un cuadro que titulé, Pintando sobre tierra del pan, un homenaje que quería hacer yo al trigo. Un fruto sin el cual no sé como habrían sobrevivido, nuestras generaciones pasadas en este terruño estéril.
En pequeño está la obra completa, y una de Kiefer al que tuve como principal referencia.

Caronjos

El ensamblaje de piezas diferentes para componer los cuadros, es una de las formas de trabajar que más uso. A veces son únicamente rectángulos de colores, otras con papel, posters... y otras, como el de la imagen, con trozos de maderas viejas, rotas y deterioradas.
Éste en concreto, es uno de los trabajos con los que estoy más satisfecho. Las maderas que usé estaban especialmente pochas, y al lijarlas y encerarlas, ese aspecto decrépito daba un contraste perfecto con el panel pintado al oleo. Además en otros cuadros había ensamblado mas de un panel, con formas irregulares y distintos colores, pero aquí el cuadro unicamente está compuesto por un rectángulo al que añadí algunos drips.

Estos días he andado, buscando maderas estropeadas, para hacer alguno más, porque desde hace más de dos años que no había vuelto a ensamblar ninguna madera vieja.
En parte porque su proceso es más largo que con los otros cuadros. Además de seleccionar la madera, hay que lijarla, echarle el mata-carcoma y encerarla para poder ensamblarla a alguna parte. Si me paro a hacer todo esto, no puedo trabajar en los otros proyectos.

Visitas veraniegas


Al igual que creo que hacemos la mayoría de los pintores, incluí en las vacaciones un cupo cultural. Este año estuve en Mallorca por lo que era visita obligada al retablo de Barceló inaugurado este año. Tenía ganas de ver en vivo algo de este pintor, que sitúo cercano a Kiefer, uno de mis favoritos. La idea del retablo me gusta, sobre todo como ha llevado a su terreno el tema religioso, escogiendo un pasaje que le iba perfecto. Y la cerámica agrietada me encantó. Además permiten hacer fotos con lo que le hice un publirreportaje bien completo con video incluido. La pena es que no te dejan acercarte, por que creo que los panes, peces, sandías, etc, ganan de cerca.
También visité en Madrid el Thyssen, con su exposición de Van Gogh. Sin ser uno de mis pintores preferidos, he de decir que con los cuadros delante se entiende mejor su prestigio, y sus records de precios. Durante la visita se me pasó por la cabeza el hecho de que cómo un tipo que pintaba esos cuadros tan coloridos y con esa sensación de disfrute que se siente, viendo su pintura, llevaba una vida tan amarga como para suicidarse.
Cuando decidí hacer Bellas Artes, el profesor de la academia donde preparaba el examen de ingresó me regalo las "Cartas a Theo" escritas por el propio Vincent y me dijo algo cómo: "Leete esto, y si no te entran ganas de ponerte a pintar, déjalo". no fui capaz de acabarme el libro, aunque tampoco lo dejé. Ahora creo que retomaré aquella lectura.

A la vuelta, he seguido con los collages con posters de cine y de cuadros clasicos que compré en el rastro aprovechando el viaje, tambien compré un marco dorado barroco con el que aún no he decidido nada. Otro día lo contaré con mas detalle.

un toque kitch



Recurro muy a menudo al collage o a ensamblajes, bien sea mezclando con papel de un poster, como en el cuadro, o con objetos varios, como maderos, telas, o marcos que incrusto dentro de las obras.
En este caso he mezclado un poster de un cuadro clásico de angelitos, -que no es de Rafael- sino de Rosso Fiorentino, también del Renacimiento. El papel esta pegado a dos rectangulos pintados al oleo y unos cuantos drips por encima.
El angelito del cuadro es ciertamente cursi, lo que le da a la obra un toque kitch que estoy explorando en los últimos trabajos, (también he hecho la versión con los angelitos característicos de Rafael). Y esta tarde he empezado a trabajar con unos posters de Audrey Hepburn que había comprado hace tiempo.
La pintura figurativa nunca se me dio especialmente bien. Requiere demasiada paciencia, y yo trabajo con muchos proyectos en mente. Así que tengo que recurrir al collage si quiero trabajar con algo figurativo.

Cocina vs arte

El cocinero Ferrán Adriá es la “estrella” de la documenta de Kassel de este año. Lo han dicho en el telediario, anunciando también que ya hay polémica sobre si un cocinero tiene cabida en un certamen artístico.

Hace poco tuve una conversación sobre este asunto, a cuenta de un concurso de tapas que últimamente están tan de moda. Aunque me considero pintor, yo defiendo que no es más artística la pintura o la escultura que la cocina, y que tan meritorio es en principio, elaborar una buena receta como pintar un cuadro, escribir un poema, o componer una canción. Y alguna hora he echado en la cocina.

Creo en el título del blog, el arte o las artes, son esencialmente entretenimiento. Una práctica hedonista que se hace fundamentalmente por el placer de hacerla, sea con pinceles o con cucharas. La equiparación que yo veo entre cocina y pintura , escultura, etc es desmitificadora de la práctica artística en si. Las iguala por “lo bajo”.

Creo que no soy el único que lo piensa. Dan Flavin, que aparece en todos los manuales de arte contemporáneo, decía: “ya es hora de que el arte se despoje de su sobrevalorado misterio, y se dirija hacia la excelencia de la realización decorativa”

Filosofía ikea

Según los catálogos de ikea, la estrategia de esta empresa para ofrecer sus productos al mejor precio, es -ademas de darles un diseño atractivo- fabricar grandísimas cantidades de cada cosa, y embalarlos del modo que les permita ahorrar más espacio en sus almacenes.
Me gusta esta filosofía tan simple como eficaz. ¿Podría trasladarse a la pintura? yo lo intento, (con todos los matices que diferencian una cosa de la otra).
Por ejemplo en la obra de la foto, el trabajo de cortar y lijar las piezas, imprimar, pintar y echar los goteos, puede hacerse a varias obras a la vez. El tiempo se aprovecha mejor en muchos aspectos, no hay que preparar los materiales en cada cuadro, mientras se seca una imprimación o un color se va haciendo lo mismo en otro...Creo que Andy Warhol me daría su apoyo. Él ya manifestó su deseo de convertirse en una máquina de hacer cuadros.
Creo que el mejor mérito de este cuadro es su sencillez, y desde el punto de vista "artístico" de suma de influencias reconozco las de las obras abstractas con cartulinas de Matisse y evidentemente, los drippings.

Drippings



Pollock es otro de mis referentes principales como se ve en este cuadro.
Supongo que todos sus "fans" hemos intentado emularlo y más de una vez nos hemos divertido esparramando pintura sobre una superficie.
Para no copiar al cien por cien los "Pollocks", yo trabajaba los fondos previamente con composiciones sencillas de lineas verticales y poco más, (algo en el estilo a Newman), buscando además el contraste entre un color al óleo, y el esmalte plateado o dorado. Algo casi kitch. Sobre estas bases soltaba los drips, procurando no tapar completamente el fondo.
Por muy fácil que parezca con la técnica drip salen, al principio sobretodo, bastantes chapuzas. De mis primeros intentos guardo especialmente este cuadro.
Comparándolo con los del "maestro" tengo la sensación de estar casi parodiándolo, a pesar de mi admiración. Pollock, concebía su obra de un modo dramático, propio de la versión romanticista del arte, tan sublime, de reflejar la personalidad y el mundo interior del artista en su obra. Mis drippings en cambio parecen meros pretextos ornamentales, fríos y distantes. Me parecen "bonitos".

Cambio de opinión



Este es el primer cuadro, del que estuve plenamente satisfecho. Por esta razón le tengo mucho cariño. Lo hicé en mi habitación del piso en el que vívía en Salamanca mientras estudiaba Bellas Artes, en 4º curso.

Para bien o para mal tengo buena memoria, porque recuerdo haber estado en clase algunos días antes viendo unas diapositivas del expresionismo abstracto americano, los Rothko, Newman, Motherwell, etc y los gestualistas como Kline, Guston, De Kooning...
La primera impresión de De Kooning no fue muy positiva. Excavation si me gustó, pero la serie de las Woman y los abstractos como Door to the river no.
Ese fin de semana estando de vinos con amigos, hojeando un periódico, apareció la noticia de que una de las woman había batido el record de precio en una subasta de arte. Un amigo comentó algo sobre el timo del arte moderno, un pensamiento muy parecido al que tuve yo cuando ví en clase las diapositivas. Yo traté de justificarlo con un ataque de corporativismo un poco absurdo. Y ahí quedó la cosa.
Mi opinión sobre Willem De Kooning, sin embargo, cambió radicalmente a raiz de esta intrascendente conversación de bar. Me había puesto de su lado. Trabajando en clase después me dí cuenta de que el estilo que yo estaba balbuceando en mis cuadros, era muy parecido al que había aborrecido en primera impresión, trabajando sin bocetos, improvisando brochazos sobre la marcha, olvidándose de los referentes. Luego me enteré que los teóricos del expresionismo abstracto lo llamaban: automatismo plástico.

Mirando ahora el cuadro creo que tiene mas parecidos con Franz kline que con De Kooning, sin embargo mi primer gran ídolo pictórico ha sido este otro. Recuerdo que tardé unas dos horas en terminarlo. La mayor parte de ellas intentando hacer la pincelada perfecta hasta que me harté, raspé todo con la paleta, di unos cuantos brochazos y eché algunos chorros directamente desde el tubo de óleo. Se produjo eso que dicen los profesores de pintura, que el cuadro en algún momento se vuelve independiente y no te permite tocarle mas.
Bastantes años después superando la manía que le tenia a los marcos, lo llevé a enmarcar. Jamás conseguí otro cuadro en este estilo del que estuviera contento, y probé a hacerlo en grande, en pequeño, en mediano... todos ellos al final los repintaba o los borraba.

De kooning + Lichtenstein + Wesselmann




Es una forma de explicar algunas de mis obras . De De Kooning me quedo con sus brochazos abstractos recreándose en el propio brochazo y olvidándose del referente. De Lichtenstein recojo su apariencia, parodia del gestualismo, exagerando las marcas del pincel, que siguen el rastro del propio brochazo. Y de Wesselman el hecho de recortar el cuadro por el contorno del garabato, pincelada, etc.
Sumando estas influencias (aunque el autoanálisis es a posteriori) el resultado son obras como la de la foto.
No es la única. Hice unas cuantas en este estilo,sólo con brochazos recortados, justo al acabar la carrera. Empleé tinta offset y aguarrás sobre tableros plastificados blancos, frotando con una bola de bolsas de plástico la forma de los brochazos, y recortando despues por el contorno con una sierra de calar. Cada brochazo había que repasarlo decenas de veces hasta que las marcas del frotado parecían las de una gran brocha.
El mayor reconocimiento en un certamen que he recibido hasta ahora, la mención en la Bienal de Zamora 98, me lo dieron con uno de ellos.

...es un entretenimiento.

"Art is entertainment" es el título de un texto de Yasumasa Morimura que recuerdo haber leido hace tiempo, con el que me identifico totalmente y que adosé a varios de mis cuadros. La idea de incrustar la frase en realidad parte de hace mucho aunque hasta el verano pasado no me decidí a probar. El resultado es el de la foto, acompañando a los personajes del Greco, los drips y demás.

La frasecita la he utilizado además para dar nombre al blog. Pensé en utilizar la traducción pero no me sonaba bien: el arte es un... lo que sea, suena demasiado rotundo y no va desde luego con el espíritu del blog, que intento que sea mucho más liviano.